En los estanques de aguas residuales municipales de la Isla Sur de Nueva Zelanda, se llevó a cabo un proyecto de desarenado para limpiar y restaurar los estanques de sedimentación de aguas residuales.
El objetivo principal del proyecto era mantener un caudal alto y constante desde el dragado hasta las bolsas de deshidratación, permitiendo al mismo tiempo el paso seguro de los residuos típicamente presentes en los lodos de aguas residuales, incluidos los materiales orgánicos fecales pesados con un 2–4 % de arena, limo y fragmentos de artículos sanitarios. Otro aspecto crucial era el riesgo para la salud que suponen los lodos de aguas residuales, que pueden contener contaminantes tóxicos y bacterias nocivas potencialmente peligrosas. Para abordar las preocupaciones ambientales, el sistema de bombeo también debía operar dentro de los estrictos límites de ruido establecidos por las normativas locales, asegurando el cumplimiento total durante toda la operación.
Para mejorar la eficiencia general del proyecto y garantizar su finalización puntual, el Ardita D150ST fue cuidadosamente estudiado y seleccionado para el proyecto de los estanques de aguas residuales municipales.
El sistema fue diseñado para gestionar un caudal mínimo de 120 m³/h, con una baja altura estática pero una larga tubería de impulsión que conecta el gran estanque con la zona de deshidratación. La bomba Cornell 6STX es capaz de manejar líquidos con alto contenido de sólidos, como este lodo de aguas residuales, ofreciendo un rendimiento robusto y fiable. El contratista, Southwater, desplegó la Ardita D150ST como unidad de refuerzo entre su draga de tornillo sin fin y los geotextiles de deshidratación. El proyecto duró 8 meses de dragado activo, abarcando tanto el verano como el invierno. Southwater quedó muy impresionada con el rendimiento y la facilidad de mantenimiento de la Ardita D150ST, mientras que el cliente final apreció la eficiencia y fiabilidad del conjunto de bombeo. El operador capacitado del cliente pudo hacer funcionar el sistema de manera segura, evitando cualquier riesgo sanitario relacionado con el mantenimiento. Al finalizar el proyecto, la bomba se reutilizó en alquiler en seco para otras operaciones de transferencia entre estanques.
